Miércoles, 26 de JULIO.
Experimentar los 14 beneficios indicados más abajo, y expresarlos.
Horario: 20 a 21.30hrs.
Instructor: Carlos Velasco. Psicólogo
Aportación: 15€
Retención del aire desde la RESPIRACIÓN COMPLETA Y SIMULTÁNEA
Realizaremos apnea estática con retención del aliento inhalado.
Abriendo espacios respiratorios desde el MIC. Movimiento Involuntario Corporal
ALGUNOS BENEFICIOS DE LA RETENCIÓN DEL AIRE
-Mayor capacidad de transporte del oxígeno en sangre hacia la célula
-Aumento de la respiración celular
-Aumento de la tolerancia al dióxido de carbono, que, al soportar mayores niveles de CO2 en sangre, elevará la oxigenación celular
-Reeducación del centro respiratorio cr
-Elasticidad y fuerza de la musculatura respiratoria: inhalatoria y exhalatoria
-Elasticidad de los pulmones (parénquima pulmonar)
-Aumento de la capacidad respiratoria y el volumen de aire ingresado
-Autorregulación del organismo: sistema cardio-respiratorio, digestivo, autónomo, snc.
-Mayor insalivación.
-Mayor autocontrol, atención y consciencia
-Calma la mente
-Revitalización del organismo
-Mayor gozo
-Mayor aprovechamiento del prana, chi, ki, taqah
Clase del 5 de julio
CARTOGRAFÍA FÍSICA y SUTIL en un CUERPO RESPIRANDO de FORMA NATURAL y VERDADERA
El cuerpo físico tiene ciertos espacios que favorecen un mayor grado espiritual
cuando la respiración es natural.
Cada vez que la mecánica respiratoria gana en libertad al "desenroscarse", todo el cuerpo se organiza, ofreciendo espacios que elevan el grado de placer y dulzura.
Aplicaremos ciertos ejercicios que faciliten el desbloqueo físico, a la vez que, nos permite habitarlo desde una mayor consciencia sensorial.
Para que se den respiraciones más efectivas, el cuerpo, en sus diferentes partes, y, muy especialmente, el tronco (caja abdominal y torácica) debe estar libre de deformaciones y disfrutar de una postura noble, natural
y correcta. Entonces, sentiremos cómo la gracia de lo espiritual es irradiada desde el tronco,
vientre y pecho, y, especialmente, la sentimos en la zona superior del pecho (cabeza del esternón), su irradiación centrífuga.
La irradiación en el vientre la sentimos a la altura del dan tien o hará (unos 4 centímetros por debajo del ombligo y hacia dentro)
Será entonces, cuando la estructura corporal y sus distintos sistemas estén lo suficientemente "acondicionados" en el lugar que les corresponde, su función será óptima para todo el sistema en general y, en particular, para la bomba respiratoria, que fluirá en libertad y según las necesidades específicas de la persona.
Existe un gran abanico de técnicas respiratorias para lograr estados expandidos de conciencia, apertura del corazón y aproximación al ser.
Cuando se realiza cualquiera de esas formas desde un cuerpo, cuya biodinámica respiratoria está libre en lo físico, psico-emocional y energético, los resultados serán más elevados, seguros y confiables.
Para que se den respiraciones más efectivas, el cuerpo, en sus diferentes partes, y, muy especialmente, el tronco (caja abdominal y torácica) debe estar libre de deformaciones y disfrutar de una postura noble, natural y correcta.
Será entonces cuando la estructura corporal y sus distintos sistemas estén lo suficientemente "acondicionados" en el lugar que les corresponde, su función será óptima para todo el sistema en general y, en particular, para la bomba respiratoria, que fluirá en libertad y según las necesidades específicas de la persona.
Hacer ciertas formas de respiración, sea de la tradición que sea, desde una biodinámica respiratoria desviada de su curso orgánico, natural e instintivo, pudiera ocasionar algún problema.
Algunas consideraciones:
-El Gran Aliento es el origen de nuestros alientos
-Cuando la respiración es natural y auténtica, sugerimos que es la madre de las medicinas
-Respiración-sensación-pensamiento-emoción-movimiento.
-Diferencia de sensaciones en la caja abdominal y torácica.
-La inteligencia corporal y la postura noble.
-Consciencia, presencia y estado de contemplación
-La sensación de apertura del corazón se percibe más en el pecho que en el vientre.
-Saborear en el pecho el estado pletórico y de expansión.
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